Si cree que sus radiadores no tienen buen aspecto, puede construir su propio revestimiento de radiador para remediar la situación
Planificación necesaria para construir su propio revestimiento de radiador
Aunque los radiadores son especialmente funcionales en invierno, a menudo no encajan visualmente con el concepto de habitación deseado. Sin embargo, antes de empezar a construir el revestimiento del radiador, es esencial una planificación cuidadosa. Aquí no sólo se decide el diseño, sino también los materiales que garantizan tanto la estabilidad como una buena disipación del calor.
- Piensa primero qué aspecto debe tener el revestimiento y qué función debe cumplir. ¿Debe ser principalmente decorativo o servir como espacio de almacenamiento adicional? Esto influirá en la elección del material y el diseño.
- Elige materiales resistentes al calor y aptos para interiores, como tableros MDF, madera o chapa perforada. Estos materiales son estables y fáciles de trabajar sin afectar a la potencia calorífica de su sistema de calefacción.
- Asegúrese de que el revestimiento que elija permita una circulación de aire suficiente.
- Mida con precisión el radiador y el espacio disponible. Los paneles demasiado grandes o demasiado pequeños pueden resultar poco prácticos o visualmente menos atractivos.
- Calcule los costes de material y prevea tiempo suficiente para este proyecto de bricolaje. Un diseño sencillo puede realizarse en un fin de semana, mientras que los proyectos más complejos pueden llevar más tiempo.
Construir los paneles
Una vez realizados todos los preparativos y seleccionados los materiales, llega el momento de la realización. Ya sean sencillos o elaborados, la construcción del marco y la elección del diseño frontal confieren carácter al revestimiento.
- Empiece con un marco base estable de listones de madera o perfiles metálicos. El marco constituye la base del revestimiento y, por lo tanto, debe cortarse con precisión y atornillarse firmemente.
- Una vez colocado el marco, fije los paneles frontales y laterales al marco. Es mejor dotar a la pared frontal de una rejilla u otras aberturas de ventilación para no obstruir la disipación de calor de su calefactor.
- Si lo desea, también puede utilizar el revestimiento como superficie de almacenamiento. Puede utilizar esta superficie para guardar adornos o pequeños objetos, por ejemplo, y dar así al panelado una función adicional.
- Lijar cuidadosamente todas las esquinas y bordes para obtener una superficie lisa y evitar lesiones. Debe prestar especial atención a posibles astillas o bordes afilados en la madera.
- Considere si también desea pintar o revestir los paneles para que combinen con el aspecto de la habitación. Sin embargo, asegúrese de elegir pinturas resistentes al calor que no se descascarillen incluso con un uso intensivo.
Colocación y mantenimiento de los paneles
Una vez que las piezas individuales están listas, el último paso es la instalación del revestimiento del radiador. Un revestimiento bien montado no sólo debe ser estable, sino también fácil de desmontar para poder realizar trabajos de mantenimiento en el sistema de calefacción.
- Antes de montar firmemente el revestimiento, compruebe que todas las piezas estén correctamente asentadas y que la estufa pueda funcionar sin problemas. Compruebe también si la ventilación es suficiente
- Fijar el revestimiento de modo que sea estable pero fácil de desmontar. Esto es importante para poder limpiar y mantener el radiador con regularidad.
- Dependiendo del material, debe acordarse de limpiar el revestimiento con regularidad para evitar que se deposite polvo. Puedes tratar los paneles de madera con productos especiales para prolongar su vida útil.
- Compruebe si los paneles afectan al rendimiento de la calefacción. Si la habitación tarda más de lo normal en calentarse, puede ser útil hacer ajustes y asegurar una mejor circulación del aire.