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Puede hacer que su jardín sea bello y respetuoso con las abejas. Hay una gran selección de plantas adecuadas
Las mejores plantas para un jardín apícola
Para proporcionar alimento a las abejas en todo momento, las plantas deben florecer en distintas épocas.
- Primeras en florecer: los cojines azules y las anémonas de madera florecen a principios de año y proporcionan a las abejas abundante néctar. Las hepáticas también muestran su mejor cara en marzo y abril y son fáciles de cuidar. Los coloridos tulipanes silvestres también atraen a los insectos beneficiosos en primavera. Los azafranes y las campanillas de invierno quedan bien bajo los árboles
- Flores de verano: la Phacelia, con sus fragantes flores azules, no se llama «amiga de las abejas» en vano. Esta planta es muy fácil de cultivar a partir de semillas. Las espuelas de caballero, los acianos, las azaleas de verano y las malvas también hacen que tu jardín sea amigo de las abejas. La menta gatera y la consuelda no deben faltar en el jardín de hierbas.
- Floración tardía: para que las abejas encuentren néctar suficiente en otoño, plante anémonas, caléndulas y girasoles de otoño. Las margaritas y los ásteres de otoño también son adecuados. La hiedra también es una buena fuente de alimento, aunque sólo florece al cabo de ocho años.
Herbas, arbustos y árboles: estas especies son populares entre las abejas
Herbas, arbustos y árboles también son populares entre las abejas.
- Herbas: Puede abastecer su jardín de hierbas ricamente y mimar a las abejas con ellas. Todas las plantas umbelíferas, como el apio de monte, el perejil y el eneldo, son muy apreciadas por las abejas. Las hierbas mediterráneas como el orégano, el romero, la salvia y el tomillo son igualmente populares. La borraja es un imán para las abejas. Importante con todas las hierbas: sólo cosechar lo suficiente para que algunas puedan seguir floreciendo y las abejas también puedan beneficiarse de ello
- Arbustos y setos: tanto tú como las abejas os beneficiáis de los arbustos de bayas en el jardín. Tanto las grosellas como las moras son deliciosas para humanos e insectos. También son populares el saúco negro y la cereza cornalina. Tampoco hay que perderse las rosas silvestres, de las que luego se pueden cosechar escaramujos ricos en vitaminas.