Los buenos exfoliantes de belleza, como el exfoliante de café, son muy fáciles de hacer tú mismo. Lo mejor de todo es que las exfoliaciones caseras apenas te cuestan nada y son al menos tan efectivas como las caras exfoliaciones de las tiendas.
Peeling de café – cómo hacer el peeling de belleza usted mismo
Un exfoliante de café es extremadamente fácil de hacer usted mismo y básicamente no le cuesta nada, ya que simplemente puede utilizar los posos de su café para ello. Además, tu exfoliante casero tiene la inestimable ventaja de que sabes exactamente cuáles son los ingredientes.
- El exfoliante está elaborado con ingredientes frescos y no contiene conservantes. Esto es un beneficio adicional para su piel, ya que los conservantes en particular son a menudo responsables de las irritaciones de la piel.
- Aunque tu exfoliante de café casero no te cuesta casi nada, es muy eficaz. El peeling elimina suavemente las viejas escamas de la piel y mejora la circulación sanguínea en las células de la piel.
- Además, la exfoliación favorece la renovación celular y el despertar de la cafeína no sólo actúa internamente. La cafeína también tiene un efecto estimulante en la piel. Después de la exfoliación con café, la piel se ve mucho más fresca y se siente muy suave.
- Accidentalmente, la exfoliación ayuda contra la celulitis no deseada, ya que tiene un efecto desintoxicante.
- El requisito es, por supuesto, que utilices el peeling casero con regularidad. Dos o tres veces a la semana deberías dedicar tiempo al tratamiento de belleza.
Cómo convertir un exfoliante de café en un pequeño elixir de belleza
Los posos de su café matutino son perfectamente suficientes para su pelado casero. Alternativamente, vierta unas seis o siete cucharadas de café en polvo en agua caliente y deje que la mezcla se cocine durante unos 15 o 20 minutos.
- Puedes utilizar el exfoliante de café en su forma original. Si se afina el pelado, se optimiza aún más el efecto.
- Puedes potenciar el efecto exfoliante mezclando los posos del café con un poco de sal o azúcar. Para una exfoliación de todo el cuerpo en la ducha, añade un poco más de sal o azúcar en la zona de los muslos, por ejemplo. Los granos gruesos potenciarán el efecto exfoliante en consecuencia.
- Para las zonas sensibles de la piel, como la del rostro, utilice los granos gruesos con mucho cuidado.
- Es mejor enriquecer el peeling facial con dos o tres cucharadas de aceite corporal para no irritar la piel fina innecesariamente. El aceite de jojoba, el aceite de argán, el aceite de almendras, el aceite de granada o simplemente un buen aceite de oliva son adecuados para este fin.